Solo la pureza de la nieve, convierte el paisaje en algo totalmente distinto de lo que nuestros ojos aprecian en otra estación del año. La acuarela, se presta a ello dándole la pureza que necesita para ser representada y obtener así los blanco y azules que necesita.
A lo largo del tiempo iré poniendo apuntes y obras en general que vaya haciendo, compartiéndolas, lanzándolas al vuelo, como hojas de papel que se lleva el viento.